Enviado por Gonzonet a través de Google Reader:
El glaucoma es una enfermedad de los ojos, en la que existe una neuropatía óptica, donde el nervio óptico padece una lesión o pierde funcionalidad, lo que ocasiona déficit en el campo visual.
Además, la enfermedad se caracteriza por la pérdida progresiva de las fibras nerviosas de la retina y existen cambios en el aspecto del nervio óptico. Uno de los principales factores que pueden influir en la aparición de glaucoma es la presión intraocular alta.
La mayoría de las personas afectadas no presentan síntomas en las primeras fases de la enfermedad. Generalmente, se notan defectos en el campo visual y pérdida de visión, cuando aparecen los síntomas, puede significar que la enfermedad está en un punto avanzado de su evolución.
No es normal que exista dolor ocular en el glaucoma crónico, pero es frecuente en el glaucoma agudo.
Las causas de la aparición de glaucoma son la edad, aparece con más asiduidad en pesonas mayores; causas genéticas; en enfermedades como la diabetes o hipertensión; en personas que han consumido esteroides; una mala alimentación, que provoca la aparición de radicales libres
Los síntomas más característicos que produce el glaucoma son la pérdida de visión lateral o periférica, dolor en el ojo, visión de moscas volantes o centelleantes, cefalea, visión borrosa, visión de halos tipo arco iris, náuseas y vómitos, y ceguera. Estos síntomas suelen suceder en el glaucoma de ángulo cerrado, donde existe una disminución del ángulo iridocorneal.
En el glaucoma de ángulo abierto, el ángulo iridocorneal es normal. La evolución es lenta, no existen síntomas aparentes pero se deteriora progresivamente la visión; en él se utilizan medicamentos que disminuyen la presión intraocular, son colirios aplicados directamente en el ojo, como:
-Mióticos -pilocarpina-, epinefrina o medicamentos derivados de ellos, que tienen como función mejorar el paso de líquido entre las cámaras del ojo.
-Betabloqueantes e inhibidores de la anhidrasa carbónica, que disminuyen la cantidad de líquido producido.
-Medicamentos vía oral, inhibidores de la anhidrasa carbónica, para que la disminución del líquido sea más constante.
-En el glaucoma de ángulo cerrado, el cuadro es más agudo y se precisa un tratamiento inmediato para disminuir la tensión ocular. Se utilizan soluciones hiperosmóticas en inyección o por boca, para controlar la tensión unas horas pero luego se debe de pasar a otros tratamientos de mantenimiento -mióticos, betabloqueantes e inhibidores de la anhidrasa carbónica-.
Los casos rebeldes deben de ser tratados con láser y en la iridotomía se extrae parte del iris y sirve para tratar casos de glaucoma de ángulo cerrado.
Fuente Imágenes ThinkStock.
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