Enviado por Gonzonet a través de Google Reader:
Cada vez que llega el invierno, es importante anticipar cualquier posible enfermedad que traiga consigo. Tomar las medidas preventivas es una obligación que todo padre debe saber.
Sin embargo, algunas enfermedades como la otitis debe ser tratada inmediatamente, sobre todo entre los 0 y 6 años de edad, cuando el bebé desarrolla el sentido auditivo como primer paso en la comunicación mediante el lenguaje.
La otitis se presenta en diferentes niveles, dependiendo del tipo de gravedad, las consecuencias de una mala curación podrían ser perjudiciales. En el caso de la otitis media aguda estamos hablando de una inflamación e infección en la zona cercana al tímpano, nos referimos a la caja timpánica. El malestar se presenta con un dolor muy fuerte hasta llegar a la pérdida auditiva, impidiendo la transmisión de las ondas sonoras.
La otitis media serosa genera mucosidad en la caja timpánica, además de algunas alteraciones en la presión del oído. Aunque el malestar resulte bastante incómodo, no se registra ningún tipo de inflamación e infección. Cuando no se cumple fidedignamente con el tratamiento, el daño conlleva a una otitis media aguda.
En cualquiera de los dos casos, se recomienda evitar el uso de bastoncillos para limpiar el oído del bebé, porque la única función que cumple es empujar toda la suciedad que hay alrededor del oído, generando mayores problemas auditivos. La otitis debe ser atendida por un médico especialista para aplicar un tratamiento antibiótico que sólo debe ser recetado por un profesional. Evite los consejos de los amigos y vecinos para esta situación.
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