Enviado por Gonzonet a través de Google Reader:
En este siglo XXI la modalidad imperante de trabajo sedentario (horas y horas detrás de un escritorio, en una oficina o con un teléfono pegado a la oreja) no suma puntos en beneficio de la salud, muy por el contrario, puede terminar perjudicándola.
Si al hecho de estar quietos, le sumamos las presiones y el estrés diario, las consecuencias pueden ser aún mayores. Músculos y articulaciones contraídas, dolores y molestias son sólo algunas de las secuelas de un estilo de vida y de trabajo con estar características.
Por ello, considerando la era moderna y sus prácticas, en Estados Unidos un grupo de empresarios idearon lo que se conoce como "Office Gym" o, en español, "gimnasia de oficina" que luego se fue expandiendo por Europa y el resto del continente americano.
"La práctica de hacer gimnasia en el lugar de trabajo ha sido ideada por los países desarrollados para ser aplicada, especialmente, en caso de empleos sometidos a tareas de repetición constante", dijo al respecto el Dr. Rubén Castaño, jefe del Servicio de Kinesiología del Hospital Universitario Austral (Buenos Aires, Argentina).
"La idea es favorecer la relajación, la meditación y los cambos de postura a fin de evitar contracturas, dolores y complicaciones articulares", añadió.
Lo cierto es que tampoco para las empresas, los dolores y cansancio corporal crónico de sus trabajadores les reportan beneficios: varios estudios han concluido que la falta de movilidad y el estrés reducen la competitividad de los empleados y, por ende, de las empresas.
Ante esta situación, los expertos consultados compartieron una serie de pautas para mejorar la vida laboral, el desempeño y la salud de los empleados: desde recomendaciones para construir un mejor ambiente físico hasta cuestiones que hacen a lo postural y actitudinal de cada uno de los trabajadores.
En principio, se recomiendan realizar "pausas activas de movimiento en la oficina", es decir, pequeños ejercicios de movilidad, articulación y estiramiento durante 15 minutos desde el mismo puesto de trabajo, al menos unas dos o tres veces por jornada.
Además, y según aconsejó Castaño, será mucho mejor complementar esto con alguna actividad física fuera de lo laboral (gimnasio, deporte, caminatas intensas, etc).
Si se debe atender el teléfono, los profesionales dijeron que se debe evitar sostener el tubo con la cabeza y, dentro de lo posible, procurar ir variando de lado al atender la llamada cada vez, es decir, cambiar cada nueva atención el tubo de oreja.
Otro consejo de oficina es mover el monitor de lugar cada tanto para evitar que los ojos (y, en consecuencia, la cabeza y el cuello) se dirijan siempre hacia el mismo punto.
A cada rato (cada vez que sea posible), levantarse de la silla y caminar al menos uno 10 metros. Esta pequeña caminata se puede acompañar con movimientos circulares de brazos y muñecas.
Otro punto esencial es la postura de sentado: ubicarse cerca del escritorio, con la espalda recta bien apoyada sobre el respaldo y justo enfrente del ordenador (en caso de que se utilice). Con respecto a los pies, recordar que deben estar apoyados en el piso o sobre una superficie adecuada.
Dos últimos consejos: en lo posible que tanto en el espacio entre el muslo y la pierna como entre el brazo y antebrazo quede un ángulo de 90 grados, y ubicar el teclado del ordenador no al borde el escritorio sino a unos 15 centímetros para dar lugar de apoyo a las muñecas.
Via Yahoo
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